Entrevista con José Luis Fernández Reyero, director de Filatelia de Correos.
(1/octubre/2005)
F.D. – El mes de noviembre del año pasado fue Vd. nombrado director de filatelia de Correos. Ha transcurrido cerca de un año desde aquella fecha. ¿Cuál es el balance que hace de la gestión realizada al frente del departamento?
J.L.F.R: Tenemos que tener en cuenta en primer lugar, que mi toma de posesión coincidió con un traslado de lugar de la Unidad de Filatelia y asimismo con el traslado de todo el almacén y enseres, un traslado muy complejo que ha condicionado en gran medida la marcha normal de la Unidad.
No obstante, a la finalización del 2005 se habrá conseguido una consolidación de la estructura organizativa que posibilite sistemas de control sistemáticos y fiables.
Además se habrá conseguido un adelanto considerable en el envío de los sellos a los abonados y en la calidad de estos envíos que empezarán a recibirse estuchados. Ha tenido lugar un proceso de formación de todo el personal de Filatelia. También se ha centralizado el canje de sellos en pesetas, proceso que ha requerido grandes esfuerzos. Se ha programado ya el 2006, año en el que espero se consoliden los sistemas de gestión implantados
F.D. – Para 2006 se ha previsto realizar una nueva exposición mundial de filatelia en España. Concretamente está anunciada para los días 7 al 13 de octubre. A un año vista no se ha enviado información de ninguna clase a los posibles interesados. ¿No volveremos a pecar de precipitación y a contar con una exigua participación del comercio extranjero, como ya sucedió en 2004 en Valencia?
J.L.F.R: La decisión sobre el lugar donde celebrar la Exposición , ha llevado su tiempo. Por otra parte, la decisión de realizarla en la calle, bajo carpas, ha originado la necesidad de contactos y largas conversaciones con el Ayuntamiento de Málaga.La Exposición está a un año vista y tenemos tiempo para realizarla con todas las garantías. Es cierto que el tiempo es muy justo, pero esto no quiere decir que las cosas se hagan con precipitación y en todo caso esperamos una alta participación del comercio extranjero.
F.D. – ¿Quién y cómo se determinan las ciudades sede de las exposiciones internacionales? Desde 1984 tres mundiales y una Espamer se han celebrado en Madrid. Sevilla, Valencia y Málaga han sido agraciadas con sendas exposiciones mundiales y La Coruña con otra Espamer. ¿No resulta sorprendente la marginación de Cataluña a la hora de asignar estos eventos, si, además, tenemos en cuenta que Cataluña ha sido tradicionalmente quien ha desarrollado en mayor medida el coleccionismo en todas sus manifestaciones y, por supuesto, también la Filatelia desde sus inicios en el siglo XIX?
J.L.F.R: Desconozco los criterios tenidos en cuenta a la hora de elegir la sede en otras ocasiones. Para el 2006 se analizaron varias posibilidades acerca de ciudades en las que concurrieran circunstancias ventajosas de ubicación, climatología, disponibilidad de espacios abiertos, estimación de afluencia, coste etc. y se eligió Málaga.
F.D. – España se ha convertido en el país del mundo con mayor número de Exposiciones mundiales de filatelia celebradas en los últimos años: Aviación y Espacio’96 en Sevilla, España’2000 en Madrid, España’2004 en Valencia y ahora España’2006 en Málaga. ¿No le parece un exceso en relación a nuestro potencial filatélico? ¿Qué argumento puede justificar esta política frente a países como Estados Unidos, Francia, Inglaterra o Alemania que no osan organizar más de una exposición Mundial cada 10 años?
J.L.F.R: La verdad es que sí, que somos un país con muchas exposiciones, quizá el de mayor número, pero también sería justo decir que con el mayor éxito.
No se si es excesivo, lo cierto es, repito, que todas han ido acompañadas de gran éxito. Además y con independencia del potencial filatélico (que no se si tiene mucho que ver) tenemos un país muy adecuado para ello, por su situación y características, además, han sido respuestas a peticiones recibidas.
F.D. – Algunos pensamos que las exposiciones mundiales de filatelia son para Correos la excusa para obtener beneficios a través de unas emisiones filatélicas especiales (en algunos casos, además, de carácter especulativo) y para los organizadores (jurados, comisarios y federativos internacionales) un subterfugio para viajar y hacer turismo gratis y todo a costa del coleccionista y el comerciante. La falta de información pública de los datos económicos y el balance de los certámenes vienen a alimentar este convencimiento. ¿Han meditado en la posibilidad de cambiar esas convicciones tan negativas? ¿Se podrán conocer los datos económicos de las exposiciones? ¿Habrá transparencia en las políticas de asignación de gastos, distribución de productos filatélicos, etc.? ¿Veremos en Málaga también la emisión de un “producto especial” carente de sentido postal como en Valencia?
J.L.F.R: Son muchas preguntas en una sola, además con afirmaciones, en el mejor de los casos, discutibles. Si en verdad existen eso que usted llama convicciones negativas, desde luego Correos, la Exposición del 2006, no la realiza como excusa para obtener beneficios con emisiones filatélicas especiales y mucho menos especulativas. Ahora bien, no cabe duda de que la Exposición hay que costearla. No hay inconveniente en que se conozcan todos los gastos. Todos los gastos de Correos y este es uno más, son trasparentes y auditados. En cuanto a la política de productos, lo que puedo asegurarle es que estará pendiente de las demandas y opiniones del coleccionismo y del comercio.
F.D. – Hace 25 años, en 1980, en nuestro país emitimos 27 sellos y dos hojitas. De los 27 sellos, 11 (el 41%) fueron impresos en calcografía y el resto en huecograbado. De las hojitas una en cada sistema. En este año de 2005 se emitirán en total 83 sellos y una hojita, la hojita por calcografía y de los 83 sellos únicamente 13 (el 15,6 por ciento) por el sistema calcográfico. La lectura inmediata es que multiplicar por tres el número de sellos parece excesivo y reducir a casi la tercera parte la proporción de sellos impresos calcográficamente es un descenso muy notable en la calidad. ¿No acabaremos confundiendo los sellos de correos con meras viñetas o cromos? ¿No le parece que estos son buenos argumentos para dejar de coleccionar sellos españoles?
J.L.F.R: El número de sellos del año 2005 y el avance de programa para el 2006, con una cifra inferior a 90 sellos (a pesar del acontecimiento de la Exposición Mundial ), es una cifra coherente con la de los países de nuestro entorno y coherente con la demanda, que por cierto es variable y ello porque seguramente, estamos ante un mercado con segmentos heterogéneos.
Pone usted el ejemplo de 1980, pero podemos retrotraernos a años anteriores y en la década de los 70 era bastante superior, por ejemplo en el año 1975 se emitieron80.
Tenemos que cuidar la calidad en el diseño y en el tipo de impresión. La calidad y un número equilibrado de emisiones (insistimos entre la posibilidad de un mercado no homogéneo), impedirá que los sellos se confundan con esas cosas que usted menciona.
F.D. – El pasado mes de junio le preguntábamos desde este mismo lugar: “Sellos en todas las oficinas de Correos. ¿Sí, o no? Su respuesta fue tajante e inequívoca:Evidentemente sí. ¿Qué se ha logrado hacer al respecto? o ¿qué hay previsto hacer para que sea una realidad la posibilidad de que el usuario del correo franquee con sellos conmemorativos sus envíos en todas las oficinas postales del país?
J.L.F.R: Como comentábamos entonces, la emisión de los sellos en pliegos autoadhesivos de 20 unidades, han tenido gran aceptación. Además se han distribuido a oficinas y estancos hasta agotar las tiradas de sellos conmemorativos de las tarifas más usuales.
Los datos son estimados, pero ya en el año 2005 se franquearán con sellos conmemorativos 105 millones de cartas, frente a 58 millones de 2004.
En el año 2006, continuaremos en esta línea, incrementando el número de sellos autoadhesivos en carnés y pliegos más manejables aún, cómodos para los clientes y fáciles de controlar para las oficinas.