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Reunido el pleno del Alto Tribunal Imaginario de la Filatelia de España, el 15 de septiembre de dos mil diez y seis en procedimiento seguido de oficio contra Edifil como responsable del Catálogo Unificado de Sellos de España y Dependencias Postales en su edición de 2017, ha aprobado por unanimidad su ingreso en el “Club de los Majaderos”.
El candidato ha re-inventado el concepto de emisión filatélica al catalogar como tal a un simple cartoncillo con cuatro sellos autoadhesivos de la tarifa A con la efigie del rey Felipe VI emitido el 2 de enero, al tiempo que ha recuperado el término carnet que la Real Academia Española había eliminado de su diccionario.
.Exposición:
ANFIL es una sociedad con más de 50 años de existencia que nació a instancias de la mayor parte de los comerciantes de filatelia españoles con la finalidad de promover un catálogo único para los coleccionistas de sellos de España. Era un problema la existencia de diferentes criterios de clasificación y valoración en función de los intereses o los pareceres de cada uno de los editores existentes en nuestro país (en aquel momento Critikian, Hevia, Lama y, hasta poco antes, Gálvez).
El objetivo de la unificación se obtuvo. Los otros catálogos fueron desapareciendo. Pero no se lograron establecer unas reglas claras criterios por las cuales se debían regir la incorporación y clasificación de los diferentes efectos filatélicos coleccionables. Por ello son numerosos los errores de descripción y clasificación existentes.
Sería un disparate imperdonable ignorar la ayuda aportada por el catálogo Edifil al coleccionismo. Pero junto a sus méritos también destacan sus obstinados errores y disparates. Éste no es el momento de señalar sus virtudes, pero tampoco la hora de resaltar más vicios que el que motiva la presente resolución: incluir una supuesta emisión del 14 de septiembre de 2016 con la denominación 2016. 14 sep. Carnet de promoción de la Filatelia.
Méritos acreditados:
Una vez examinada la última edición del «CATÁLOGO UNIFICADO EDIFIL DE SELLOS DE ESPAÑA Y DEPENDENCIAS POSTALES», resultan probados los siguientes hechos:
I.- El denominado Carnet de promoción de la Filatelia no es una emisión de sellos. Simplemente es un cartoncillo en el que se han adherido cuatro sellos del rey Felipe VI emitidos 9 meses antes (el 2 de enero) según reseña el propio catálogo Edifil con el nº 5014.
II.- Prueba de que en ningún caso puede considerarse una emisión de sellos legal es que el emisor no es el órgano público competente para ello. Según la legislación en vigor, el Estado tiene el monopolio de la propuesta y la emisión de signos de franqueo. Evidentemente este «producto» ni ha sido aprobado por la Comisión de Filatélica del Estado del Ministerio de Fomento conforme establece la ley postal de 2010, ni, por supuesto, su circulación ha sido autorizada por la preceptiva Orden del Ministerio de Hacienda que exige su publicación en el Boletín Oficial del Estado.
III.- Se cita como fecha de puesta en circulación el día 14 de septiembre sólo por ser el día de inauguración de la Exposición de Zaragoza donde era vendido al público aunque en el stand de la asociación de comerciantes. Por supuesto no era despachado por Correos puesto que no era un producto suyo.
IV.- Edifil lo define como carnet (carnet es el galicismo que fue rechazado por la Real Academia a favor del término carné).
V.- Pero este objeto no es un carné, ni desde el punto de vista de la RAE, ni como lo entiende el coleccionismo filatélico.
La RAE registra dos acepciones para el término carné:
1.- Documento expedido a favor de una persona, generalmente en forma de tarjeta y provisto de su fotografía, que sirve para acreditar su identidad, su pertenencia a un colectivo o su facultad para realizar una actividad.
2.- Cuaderno pequeño de bolsillo para apuntar cosas.
Por su parte, en filatelia un carné es un pequeño cuaderno constituido por hojitas que contienen un determinado número de sellos, del mismo o diferente valor y diseño, impresos juntos y en ocasiones en parejas capicúa. (Diccionario de Filatelia, Francisco Javier Padín, 1996).
Resolución:
Siendo todos los hechos arriba expuestos graves errores que califican a su autor como un genuino majadero, este tribunal sentencia que Edifil es inequívoco merecedor de su ingreso en el Club de los Majaderos de la la Filatelia.
En Barcelona a 26 de septiembre de 2016