Filatelia, Post 1936 — 15 de marzo de 2004

La filatelia de los humildes: por un chato de vino.

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Toda afición conlleva un gasto económico, pero es bien cierto que éste suele ser directamente proporcional al poder adquisitivo de cada uno.
Desde los albores del coleccionismo de la filatelia, una buena parte de los filatélicos (sobre todo los de menos recursos) encaminaron su afición en busca de piezas de poco valor, muy corrientes en su época, pero que a ellos les satisfacía enormemente.
Así, han llegado a nuestros días, estudios de plancheos del nº1, con matasellos de araña en distintos colores y con baezas de distintas fechas y lugares; estudios de matasellos sobre los 4 cuartos, pelón, cadete, etc. Muchos de estos estudios y colecciones alcanzan hoy día una elevada cotización.
Actualmente este tipo de coleccionismo es muy difícil de llevarse a cabo, pues de todos es conocido, que ejemplares usados actuales tienen un precio incluso superior al de los ejemplares nuevos. Uno de los caminos que llevan a cabo muchos de nuestros compañeros, es sin duda, diferentes estudios de los sellos adhesivos de valor variable (ATM¨s). Pero somos otros muchos, los que de momento nos cuesta entrar en este tipo de coleccionismo y buscamos otras alternativas.
Una de estas alternativas, la podemos encontrar en el segundo centenario español teniendo como base, el bajo precio de las emisiones de los años sesenta, setenta y ochenta. Y así, con paciencia (como toda buena afición) y por muy poco dinero, podemos hacer por ejemplo un estudio de las variantes de color de muchos de los sellos de las emisiones de Turismo y de Castillos.
A continuación, se muestra una recopilación de los distintos colores que he encontrado (de momento) del sello dedicado en 1964 al Alcázar de Segovia.

Cada uno de estos sellos se pueden encontrar (por separado) a un precio que oscila entre los 5 cts. y los 10 cts. y que mi modo de parecer forman un bello conjunto.
Este tipo de colección se puede completar, con otro tipo de variedades que no sean de color; aunque claro está, el precio es superior. Entre las variedades que podemos encontrar, tenemos fuelles en el papel y calcado al dorso.