El sábado se conocerá, en el transcurso de una cena oficial, el nombre del ganador o ganadores del I Campeonato Balear de Filatelia. Los candidatos, unos quince finalistas de Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera, exhiben estos días sus méritos en el Club Diario de Ibiza. Un jurado compuesto por Joan Estelrich, Joan Miquel Llompart y Antoni Martín Oliver elegirá cuáles de las colecciones presentes merecen pasar a la categoría estatal de esa disciplina de secretos apasionantes.
«Parece mentira la cantidad de información que es capaz de transmitir un pedazo de papel tan pequeño», responde sorprendido Andrés Carlos López Seguí cuando le pregunta el profano en el coleccionismo filatélico qué interés real tiene un sello. «Yo empecé a coleccionarlos cuando tenía 7 u 8 años por los temas a que estaban dedicados, como quien colecciona cromos. Después te aburres de coleccionar cromos y vas especializándote en alguno de esos temas», informa, tratando de contagiar su entusiasmo por esa afición, casi una cultura de tentadores secretos. López Seguí, hijo del pintor Carloandrés, es el comisario de la exposición que ayer se inauguró en el Club Diario de Ibiza y en la que se exhiben las colecciones finalistas de lo que será el I Campeonato de Balears de Filatelia, cuyos resultados se darán a conocer el sábado en el transcurso de una cena solemne en un restaurante ibicenco.
Siete coleccionistas de Mallorca, siete de Menorca y tres de las Pitiüses participarán en ese combate final de la filatelia balear, que se lleva a cabo por primera vez. Un jurado que preside Joan Estelrich -especialista en Historia Postal-, y que completan Joan Miquel Llompart y Antoni Martín Oliver, especializados en filatelia temática y tradicional respectivamente, se encargará de decidir qué colecciones merecen pasar a la categoría nacional y cuáles se quedan en «una categoría regional alta», en palabras de López Seguí.
La exposición que se exhibe en el Club Diario de Ibiza tiene algunas curiosidades interesantes incluso para el público no filatélico, como las cartas que llevan el sello de `Censuradas´ por la cúpula militar en la época franquista, la publicidad de una popular farmacia ibicenca aún en activo o el título de una de ellas, `Divino Afflante Spiritu´, que sugiere algún misterio del tipo `Código Da Vinci´ o `El nombre de la rosa´. Los príncipes Felipe de Borbón y Letizia Ortiz son probablemente los rostros más recientes que pueden hallarse en la exposición, llena de sellos de las procedencias más remotas cuyas peculiaridades pueden descubrirse a través de esos «pequeños trozos de papel», como les llama el comisario de la muestra. «Cada sello informa sobre el presidente del país, su alfabeto, su moneda, su sistema político y muchas cosas más», subraya López Seguí, un gestor de patrimonios, vicepresidente de la Federación Balear de Sociedades Filatélicas, «una de las más activas de España».